Un raro encuentro celestial tendrá lugar este 21 de diciembre, Júpiter y Saturno se encontrarán en una ‘Gran conjunción’, lo más cerca que se pudieron ver juntos en el cielo durante casi 800 años.
Una conjunción astronómica ocurre cuando dos cuerpos celestes parecen cruzarse o encontrarse pudiendo ser vistos desde la Tierra. En esta ocasión ocurrirá un encuentro entre los dos planetas más grandes de nuestro Sistema Solar. Las órbitas de Júpiter y Saturno se alinearán para permitir que los mundos gigantes se se ‘unan’ en un evento conocido como la Gran conjunción.
Cuando sus órbitas se alinean cada 20 años, Júpiter y Saturno se acercan mucho entre sí. Júpiter orbita alrededor del sol cada 12 años, mientras que la órbita de Saturno tarda 30 años, por lo que cada pocas décadas Júpiter da vueltas a Saturno, según explica la NASA.
Raro evento celestial
No todas las «grandes conjunciones» son iguales y esta en particular es rara y especial. En primer lugar, estos planetas no han estado tan juntos en casi 400 años, y no se han podido observar de esta manera desde la época medieval, en 1226. Además, coincide con la fecha del solsticio de invierno en el hemisferio norte, donde los dos gigantes gaseosos aparecerán separados tan solo por una décima de grado, formando una especie de planeta doble.
Por otro lado, la Gran conjunción de Júpiter y Saturno no es el único evento astronómico que podremos disfrutar en esta fecha. Según la American Meteor Society (AMS) en la noche del 21 al 22 de diciembre, la lluvia de meteoros Úrsidas anual alcanzará su punto máximo.
Cómo observar la Gran Conjunción
Hasta el 21 de diciembre, Júpiter se verá como una estrella brillante y será fácilmente visible, mientras que Saturno tendrá un brillo un poco más débil y aparecerá situado un poco más arriba y a la izquierda de Júpiter, hasta que este lo ‘adelante’ el día del solsticio, para luego cambiar posiciones en el cielo.
Los planetas serán fáciles de observar a simple vista desde cualquier lugar del mundo, aunque la visibilidad será mayor cerca del ecuador. Para verlos mejor será necesario mirar sobre el horizonte en el suroeste justo después de la puesta de sol.
Júpiter y Saturno son muy brillantes, por lo que si el cielo está despejado se podrán observar incluso pese a la contaminación lumínica. Aquellos que los miren con binoculares o un telescopio pequeño podrán además ver las cuatro grandes lunas de Júpiter orbitando alrededor del planeta, indica la NASA.
La «estrella de Belén» o «Estrella de Navidad»
La conjunción a veces recibe el apodo de «Estrella de Navidad» o «Estrella de Belén» por su conexión con la historia de la natividad cristiana. En la historia, la estrella guía a los Reyes magos hasta el pesebre en que nació de Jesús. Los astrónomos han intentado vincular la estrella a varios eventos celestes poco comunes, incluido un cometa, una supernova y una conjunción.
Uno de los primeros astrónomos en sugerir una explicación para el relato bíblico de la Estrella de Belén, fue el célebre alemán Johannes Kepler, que en 1614 estableció la hipótesis de que el fenómeno pudo obedecer a la conjunción de los planetas Júpiter y Saturno.
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