La mitología mexica está repleta de seres fantásticos que dan origen a ciertos eventos naturales o sobrenaturales de su cultura. Uno de ellos son los Chaneques, los duendes aztecas.
La cultura azteca es una de las más importantes de toda América, por lo que es normal que su mitología sea una de las más ricas y extensas.
En la actualidad se han descubiertos cultos a diferentes dioses y criaturas mitológicas que formaban parte de la creencia popular, dando paso a una inmensa cantidad de mitos y leyendas.
En su mayoría, estos seres mitológicos eran creados con un único propósito; explicar algunos aspectos de la vida natural.
Sin embargo, estas leyendas también eran inculcadas para generar el miedo y el terror, generar impresión o, sencillamente, para cuidar ciertos aspectos de la naturaleza.
Ese es el caso de los Chaneques, unas criaturas similares a duendes que tenían como propósito defender la vida silvestre.
Chaneques, protectores naturales
De acuerdo a los textos encontrados en las ruinas aztecas, se sabe que estos seres tenían apariencia de niños o adolescentes que apenas y alcanzaban el metro de altura. Aunque en otras versiones solo miden los 20 centímetros.
Habitaban en la naturaleza ya que tenían como labor el de proteger toda la vida silvestre, desde los animales hasta las vegetaciones. Por esa razón podían encontrarse en las selvas, los bosques, los ríos, manantiales y lagunas.
De acuerdo a las leyendas, eran seres muy traviesos, por lo que solían hacer muchas maldades a las personas que se adentraban a sus espacios.
Entre estas destacan la de esconder o romper cosas que les llamen la atención. También se menciona que se colaban a las casas para jugar con los niños. Después los raptaban para convertirlos en sus esclavos.
Similitud con los duendes
Los Chaneques son altamente reconocidos por los historiadores como la versión más antigua de los duendes actuales.
De hecho, existen varias similitudes entre ambos. La primera y más importante es su diminuto tamaño. Otra característica es que habitan en zonas naturales, como los bosques. En la mayoría de leyendas relacionadas con los duendes, estos suelen vivir en zonas boscosas.
Su aspecto jovial y travieso también es mencionado en diferentes culturas europeas, donde los duendes son sumamente populares.
Se cree que existían dos tipos; los blancos, aquellos que tenían un aspecto agradable y juvenil que, si alguien se los encontraba, era un presagio de la buena suerte.
Y los negros; que su aspecto físico era aterrador al tener muchas deformidades y alteraciones orgánicas. Se creía que su alguien se topaba con ellos era porque tendría mala suerte. También se creían que su aparición significaba oscuridad, problemas o que alguien enfermería de gravedad.
Chaneques: los dioses traviesos de los bosques. Si en tu casa desaparecen las cosas, o caen solas cazuelas y ollas de la cocina, puede ser que haya un chaneque haciendo travesuras. https://t.co/SuFUvNuZLP pic.twitter.com/k8hUAus04G
— México (@mexico) April 27, 2018
Es posible que los Chaneques sí sean la primera versión del duende tal cual como lo conocemos en la actualidad, seres mitológicos curiosos y fascinantes que protegían a la naturaleza y que nos enseña más de la mitología azteca.
Referencias: Mitología Azteca
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