En los años 30, numerosos periodistas visitaban regularmente a Tesla en el piso 20 del Hotel Governor Clinton de Nueva York en el que vivía. A veces, Tesla hablaba de cómo creía que iba a ser el futuro.
Estas predicciones tienen un valor especial porque pertenecen a un artículo firmado por el propio Tesla, algo muy poco habitual. Se cree que el texto fue escrito en colaboración con el periodista de origen alemán George Sylvester Viereck, que era amigo del inventor ingeniero y físico de origen serbio.
Tesla tenía algunas ideas bastante raras en materia de nutrición o religión, pero también fue un genio cuyos descubrimientos han contribuido al avance científico en multitud de campos. Estas son algunas de sus predicciones más sorprendentes:
Creación de la Agencia de Protección Ambiental
35 años antes de la creación de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) estadounidense, Tesla predijo su creación. La labor de un gabinete de higiene ambiental sería, para el científico, más importante que la del gabinete encargado de la guerra. Tesla también comentó que la preocupación, por ejemplo, por el estado de las playas, sería algo habitual, así como la purificación y limpieza del agua.
Educación, guerra y los periódicos
Tesla imaginaba un mundo en el que los descubrimientos científicos serían una prioridad sobre otros aspectos como la guerra o la política. Aunque ha tenido razón solo a medias, Tesla pronosticó que los avances científicos y tecnológicos tendrían tanto o más importancia para los medios de comunicación que los conflictos bélicos o la alta política.
Robots
Los primeros trabajos de Tesla en materia de automatización datan de 1890, cuando presentó un bote autónomo que asombró al público durante una exposición científica en 1898, en el Madison Square Garden. Tesla creía que la mano de obra humana desaparecería completamente en determinados trabajos peligrosos o desagradables, y que sería sustituida por máquinas automáticas.
También predijo que los científicos trabajarían en descubrir y perfeccionar una máquina pensante para que les ayudase en sus labores.
Salud y dieta
El inventor desarrolló algunas teorías bastante inusuales sobre la dieta, sobre todo al final de su vida. En sus últimos años por ejemplo, cenaba solo un poco de leche con miel. La pérdida de peso que ello le provocó dio lugar al mito de que murió en la ruina.
Pese a estas ideas, Tesla pronosticó un futuro en el que la alimentación volvería los ojos hacia la salud. En su opinión, estimulantes como el café o el tabaco dejarían de estar de moda (solo acertó en este último), y los ciudadanos del futuro apostarían por la disminución de aditivos químicos en los alimentos y la reducción del consumo de carne.
Tesla también predijo que habría suficiente producción de cereales como para alimentar todo el planeta. Probablemente no contó con el desigual reparto de esos recursos.
Los teléfonos móviles
En una entrevista con la revista estadounidense Colliers, en 1926; Tesla reveló otro de sus pronósticos futuristas en el cual se desarrollaba la idea de una tecnología capaz de transmitir imágenes, música e incluso video en todo el mundo.
El inventor acuñó la frase «tecnología de bolsillo», llegando a predecir la invención de los smartphones casi 100 años antes de que se hicieran realidad.
«Podríamos presenciar y escuchar eventos como si estuviéramos presentes», explicó Tesla.
Energía barata y gestión de los recursos naturales
Tesla creía que el nuevo siglo traería la necesidad de gestionar científicamente los recursos naturales para evitar catástrofes, aprovechar la energía eléctrica de la naturaleza, y poner fin a los combustibles fósiles.
El científico adelantó ideas como la reforestación o la generalización de las estaciones hidroeléctricas.
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Probablemente las predicciones de Tesla no eran del todo exactas, pero sin lugar a dudas, el científico serbio entendió muy bien algunos aspectos del futuro, como los relacionados con los modernos ordenadores, la robótica, o la preocupación por la salud y el medio ambiente.
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