Un proyecto ambicioso para limpiar la contaminación de plástico del Océano Pacífico se puso en marcha gracias a The Ocean Cleanup, quienes comenzaron a remolcar su sistema hacia el mar.
Un equipo de científicos e ingenieros comenzará la ambiciosa limpieza de plásticos en el océano en un tramo de agua tres veces mayor al tamaño de Francia conocido como la Isla de basura o el Gran Parche de Basura del Pacífico.
El Gran Parche de Basura del Pacífico, es un área entre Hawai y California, que cubre 1,6 millones de kilómetros cuadrados, donde se acumulan desechos de plástico, desperdicios y otros desechos hechos por el hombre, de acuerdo con la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, NOOA.
El plástico del parche proviene de fuentes marinas y terrestres, así como del tsunami Tohoku 2011 que azotó Japón.
Un estudio reciente descubrió que 1,8 toneladas de plástico con un peso de 80,000 toneladas métricas se encuentran actualmente a flote en el Gran Parche de Basura del Pacífico.
System 001
Se lanzará una barrera flotante de 600 m de longitud frente a la costa de San Francisco que, impulsada por corrientes, olas y viento, tendrá como objetivo recolectar cinco toneladas de desechos de plástico cada mes.
El aparato marino conocido como System 001 y muy parecido a un fideo gigante, es una creación del inventor holandés Boyan Slat, que fundó The Ocean Cleanup a la edad de 18 años en 2013.
Junto con 70 miembros del personal, ha pasado los últimos cinco años probando 273 modelos y seis prototipos diferentes como parte del proyecto de 20 millones de dólares antes de llegar al diseño actual, apodado «Wilson» en referencia a la pelota de famoso voleibol de la película Castaway o Náufrago.
La estructura consta de 60 unidades contiguas formando un tubo gigante en forma de C unido a una falda impenetrable de tres metros de profundidad que recogerá desechos plásticos de 1 cm de diámetro y mayores, así como redes de pesca desechadas, ya que roza la superficie del océano.
El sistema de limpieza será remolcado más allá de Alcatraz y debajo del puente Golden Gate hacia el Océano Pacífico, donde se someterá a dos semanas de pruebas operacionales a alrededor de 250 millas náuticas (463 km) de la costa antes de comenzar su misión. Estará equipado con tecnología de radiodifusión de localización para evitar que los buques se topen con ella.
El equipo espera eliminar los desechos acumulados cada seis semanas utilizando un recipiente de soporte antes de transferir los desechos de plástico a los Países Bajos para reciclarlos.
El oceanógrafo Laurent Lebreton explicó: «Moviéndose con el viento y las corrientes de la misma manera que el plástico, la barrera debería autoajustarse una vez desplegada. Atrapará escombros grandes antes de que pueda descomponerse en microplásticos nocivos. Alrededor del 92% del plástico en la región se compone de piezas de más de 5 mm, por lo que ese es nuestro objetivo».
Es el más grande y sucio de los cinco sistemas circulatorios oceánicos conocidos como giros, pero los investigadores afirman que el proyecto podría eliminar el 50% de los plásticos en el área dentro de cinco años.
Preocupación por la vida marina
Sin embargo, las predicciones de que Ocean Cleanup podría eliminar el 90% de los plásticos de superficie en todo el mundo para 2040 utilizando una flota completa de sistemas han sido recibidos con escepticismo por parte de los ambientalistas. Los críticos del proyecto también temen que el sistema pueda representar una amenaza para la vida marina.
La barrera fue diseñada para no enredar a los peces y mamíferos marinos y que pueden nadar sin problemas, pero indudablemente habría un cierto grado de captura incidental.
«Uno de los desafíos que tenemos es que queremos atrapar plástico, no pescado», dijo Joost Dubois, jefe de comunicaciones de The Ocean Cleanup. A lo cual añadió, que las tripulaciones verificarán manualmente la basura para asegurarse de que no capturen accidentalmente peces u otros animales marinos.
Ocean Cleanup publicó una evaluación de impacto ambiental independiente en julio para abordar estas preocupaciones.
El jefe de operaciones, Lonneke Holierhoek, dijo: «El plancton y los diferentes tipos de vida marina ya se ven afectados por los desechos flotantes que hay. Trabajaremos con el conocimiento que obtenemos para minimizar cualquier impacto».
Un portavoz de Greenpeace dijo: «Explorar nuevas ideas y tecnologías para limpiar la contaminación del océano es loable y [el proyecto] incluso puede tener éxito en eliminar al menos parte del desperdicio».
La prevención es mucho mejor que curar y, para enfrentar la crisis de la contaminación, las empresas deben dejar de producir tanto plástico, y nosotros debemos empezar a Reciclar, Reducir y Reutilizar.
Imagen de portada. Créditos: The Ocean Cleanup.
