Un equipo de ecologistas han descubierto una especie completamente nueva de tití que vive en áreas remotas del Amazonas.
Rodrigo Costa-Araújo, del Instituto Nacional de Investigación Amazónica en Brasil, se topó por primera vez con la nueva especie por accidente. Una banda de tres monos estaba sentada en las copas de los árboles en un área del sudeste del Amazonas cerca de los ríos Tapajós y Jamanxim, cuando Costa-Araújo notó su inusual pigmentación.
Para obtener más información, Costa-Araújo y su equipo organizaron 10 expediciones entre 2015 y 2018 a «áreas clave» del sur del Amazonas con poca o ninguna información sobre los titíes, anotando las coordenadas geográficas, así como el tiempo y el tipo de hábitat de cada uno de los avistamientos de tití de cola blanca. Los investigadores también recolectaron cinco especímenes para un examen más detallado bajo un permiso emitido por el Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad, una división del Ministerio de Medio Ambiente de Brasil.
Diferencias
El llamado Mico munduruku se distingue de otros titíes amazónicos con su cola blanca única. Ya que, por lo general, son de color negro.
Las marcas y pigmentación de los titíes fueron las primeras características que los distinguieron de otros en su género. Además de tener una cola blanca, los individuos mostraron una espalda beige amarillenta, patas blancos y antebrazos blancos con un parche beige amarillento en el codo.
Su ADN fue la segunda característica inusual. Costa-Araújo y su equipo explican que sus genomas muestran que están estrechamente relacionados pero separados de otros titíes amazónicos conocidos.
Tití Munduruku
El nombre es un homenaje a los indígenas Munduruku, presentes en la región y se refiere a la distribución geográfica de la especie.
«Aproximadamente la mitad del área de distribución del tití se encuentra dentro de las tierras Munduruku», dice el investigador Rodrigo Araújo.
Desafortunadamente, esta es un área que enfrenta una degradación ambiental extensa como producto de la tala ilegal y la expansión agrícola. Los planes para construir cuatro nuevas centrales hidroeléctricas representan otra amenaza para el recientemente descubierto animal.
«Por lo tanto, así como hemos descubierto esta especie, ya debemos preocuparnos por su supervivencia», dijeron los investigadores. Las «amenazas solo aumentarán a medida que se completen las centrales hidroeléctricas y los esquemas de infraestructura complementarios, como carreteras y líneas de transmisión, lo que provocará asentamientos más intensos y reducción de bosques en la región».
Los expertos dicen que «se necesita urgentemente más investigación» para poder identificar el rango de la especie, el tamaño de la población y la densidad de la población, y así descubrir el estado de conservación de Mico munduruku y las formas de mitigar las amenazas ambientales.
El descubrimiento apareció en la revista científica PeerJ.
