Es colombiano, ingeniero civil y tiene actualmente 106 años de edad. Sin embargo, lo más impresionante de Lucio «Chiquito» Caicedo, es que descifró una histórica fórmula matemática que no había podido ser resuelta.
Si alguien le había dicho a Lucio que a sus 104 años de edad, su tesis doctoral estaría siendo evaluada por la Universidad de Manchester, quizás se hubiera reído. Pero ahora, tras años de investigación y mucho esfuerzo, el centenario aseguró haber resuelto un problema que fue un quebradero de cabeza para los ingenieros durante muchísimos años.
Lucio Caicedo y su tesis doctoral
«Nunca es tarde» o «nunca te rindas» son frases que usamos para motivarnos, pero en muy pocas ocasiones se aplican de forma literal en la vida. Ese es el caso de Caicedo.
A sus 104 años de edad consiguió entregar su tesis doctoral desde Medellín a la Universidad de Manchester, una de las más prestigiosas del mundo. Sin embargo, pocos se imaginaron que, al defenderla, resolvería uno de los enigmas más matemáticos más longevos de la historia.
Ni siquiera la cuarentena por la pandemia lo desanimó y, con mucho esfuerzo e investigación, descifró la fórmula que permite calcular el caudal óptimo de un río para producir energía eléctrica.
Lucio nació en Cali, al occidente de Colombia, el 22 de mayo de 1916. Se graduó de la Escuela de Minas de la Universidad Nacional de Colombia. En 1943, durante la Segunda Guerra Mundial, viajó a Reino Unido, para estudiar una maestría en el Instituto de Ciencia y Tecnología de la Universidad Victoria, en Manchester.
A los pocos años se licenció como Ingeniero Civil, obteniendo el título en 1947.
En 1978, formó parte de la Escuela de Ingeniería de Antioquia y, más tarde, llegaron muchos éxitos en Colombia; fundó 2 compañías y e involucró de lleno en la lucha por la igualdad. Tuvo otras aventuras académicas y se propuso como objetivo presentar su tesis doctoral.
Fue gracias a su arduo trabajo que consiguió una fórmula matemática que ha sorprendido a los expertos. Después de todo, este enigma tenía más de 200 años.
Un enigma resuelto 200 años después
Resulta sorprendente en un contexto como el de los últimos años de la humanidad, donde las personas de la tercera edad eran uno de los grupos con más riesgos a causa de la pandemia. Pero «chiquito» usó como una ventaja el no poder salir de su hogar en Medellín y puso todo su esfuerzo en terminar el trabajo. De esta manera, pondría fin a una de asignatura pendiente.
Cabe resaltar que nadie había estado, siquiera cerca, de resolver este enigma matemático y si bien, aún falta la respuesta de las autoridades de la universidad, el centenario declaró:
«No se sabe cuándo tenga noticias de la tesis. La vez pasada se demoró 25 meses la discusión del tema y tuve que escribir como 170 correos electrónicos aclarando puntos de vista.
«El tiempo viene y va, y el tiempo perdido jamás volverá».
Muchos le han preguntado cuál es su secreto para mantenerse tan activo después de 104 años. Aseguró que algunos eran bañarse con agua fría, comer muchísima fruta y nutrir su mente leyendo y estudiando constantemente.
Lo más sorprendente de todo es que Caicedo manifestó no estar conforme con la entrega de sus tesis, ya que tiene en mente un nuevo objetivo: repasar la gramática alemana. Idioma que aprendió hace 90 años.
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Sin duda, una historia cautivadora y casi heroica de un hombre que jamás se rindió y que nos sirve de motivación para seguir luchando y no ponernos más trabas que las que nos da la vida.
Referencias: La Vanguardia / La Bioguía / Perfil / RCN Radio.
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