Un estudio reciente afirma que el derretimiento de los glaciares podría provocar desprendimientos de tierra provocados por el cambio climático, que, por su parte, aumentan el riesgo del surgimiento de tsunamis.
De acuerdo con los datos de estudio, el hielo de los glaciares sirve como un soporte para las rocas cercanas. Sin embargo, el deshielo provocado por el calentamiento global incrementa el riesgo de deslizamiento de estas partes de tierra, que al caer al agua podrían causar enormes tsunamis.
Los tsunamis y las avalanchas no son los únicos peligros causados por la retirada de los glaciares. Los glaciares de montaña que se derriten también pueden dejar grandes lagos a gran altura; estos lagos pueden drenarse repentinamente, descendiendo en cascada por las laderas.
También puede interesarte: El hielo marino más antiguo y espeso del Ártico ha comenzado a romperse.
Antecedentes
Un ejemplo citado por los investigadores, es un tsunami que se originó como consecuencia de un deslizamiento, ocurriendo el derrumbe de un talud junto al glaciar Tyndall (Alaska) en 2015, que envió 180 millones de toneladas de roca al fiordo Taan. Este hecho provocó causó un tsunami con una ola de 193 metros de altura, una de las más altas jamás registradas.
«Es probable que ocurran más derrumbes de este tipo a medida que los glaciares de montaña continúen reduciéndose y el permafrost alpino se descongela», escriben los autores, dirigidos por el geólogo Bretwood Higman de Ground Truth Trekking.
El estudio se encuentra publicado en Nature Scientific Reports.