Un equipo de arqueólogos ha descubierto los huesos de al menos 14 mamuts lanudos en un pozo excavado en la ciudad de Tultepec en México. Los expertos creen que los restos apuntan al primer descubrimiento de trampas de mamut hechas por el hombre.
El descubrimiento realizado por investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH) muestra que los humanos prehistóricos tenían más conocimientos de lo pensado, sobre la caza de animales masivos hace 15,000 años.
Se cree que estos humanos trabajaron juntos para planificar sus comidas y atrapar a los animales de una manera sofisticada, algo que los científicos descubrieron al excavar dos pozos artificiales que contenían a estos animales del período del pleistoceno.
El arqueólogo Luis Córdoba Barradas quien participó en la investigación, dice que los primeros humanos usaron una técnica de caza coordinada para obtener comida.
«Solíamos creer que una técnica de caza incluía asustar a los animales en depresiones naturales, como los cañones. Pero aquí está claro que los cazadores coordinaron la creación de estos pozos», dijo Córdoba Barradas.
«Muestra claramente que eran personas bien organizadas y trabajadoras que conocían muy bien la región», agregó.
El hallazgo
Los restos fueron hallados por trabajadores de la localidad de San Antonio Xahuento, en Tultepec, y consisten en 824 huesos de al menos 14 animales de la familia elephantidae; dos vértebras y una mandíbula de camello, así como el molar de un caballo.
Presentación de los hallazgos de contextos arqueológicos de cacerías de #Mamuts en #Tultepec #EstadodeMéxico. pic.twitter.com/Yg3aDorfGf
— INAHmx (@INAHmx) 6 de noviembre de 2019
El equipo de investigadores ha trabajado en el sitio, cerca de donde el gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador está construyendo un nuevo aeropuerto para la Ciudad de México, durante casi 10 meses, en el áspero pozo de 26 pies de profundidad.
También se descubrió que algunos de los huesos tenían carteles que mostraban que los animales habían sido cazados. El pozo parece haber sido diseñado en el fondo de un lago entonces retirado donde todavía son evidentes cortes antinaturales de 90 grados, una fuerte caída hacia la cual se cree que los cazadores han llevado a las bestias.
Córdoba Barradas explicó que en la zona vivieron durante millones de años entre seis y siete manadas de mamuts. «Esas manadas crecían, se reproducían, morían, los cazaban, nacían nuevos mamuts. Es un proceso en esta zona, pero además convivían con otras especies, como camellos, caballos, bisontes, aunque los restos de estos animales no se encuentran tan frecuentemente porque son mucho más frágiles», destacó.
Los huesos se agregarán a una exhibición comunitaria creada para los primeros huesos de mamut encontrados en el área.
