Un equipo de arqueólogos han descubierto dos notables lugares de enterramiento de la Edad de Bronce en Siberia, que contiene los restos de un chamán que posee una asombrosa parafernalia.
Uno de estos antiguos sacerdotes fue enterrado con un «disfraz» hecho de alrededor de 50 picos de aves, mientras que el otro fue encontrado con un par de lo que parecen ser gafas de bronce.
Los restos de aves estaban dispuestos alrededor del difunto como si hubieran sido usados como un collar, tocado o armadura. No está claro, aun, si los picos estaban unidos entre sí o a un trozo de tela.
Los dos esqueletos fueron descubiertos en el sitio arqueológico de Ust-Tartas en la región de Novosibirsk de Siberia, donde anteriormente se han excavado más de otros 30 sitios de enterramiento.
«Nada de lo que encontramos anteriormente fue tan impresionante como [los] descubrimientos en estas dos tumbas», y agregó que «ambos hombres deben haber desempeñado funciones especiales en la sociedad», dijo Lilia Kobeleva, del Instituto de Arqueología y Etnografía de Novosibirsk a The Siberian Times.
Se cree que los picos que formaron el traje ceremonial eran de garzas o grullas, aunque aún no se han examinado y analizado completamente. El accesorio aviar se colocó a lo largo de la parte posterior del cuello y el cráneo del hombre, lo que, según Kobeleva, podría indicar que actuaba como una especie de collar protector.
Los investigadores ahora planean pasar meses separando las plumas con esmero para determinar el número exacto y aprender cómo se unieron, ya que no hay agujeros de montaje visibles.
El segundo esqueleto estaba ubicado en una tumba cercana de varios pisos, donde dos niños, que se cree que tenían cinco y diez años cuando murieron, fueron enterrados encima de un separador de madera. Debajo de esta partición estaba el esqueleto de un hombre adulto, junto con un par de gafas que parecían al lado del cráneo.
Estas gafas antiguas consisten en dos círculos y un puente de bronce, aunque los arqueólogos no están seguros de si el aparato era parte de una máscara de entierro o estaba relacionado con la práctica espiritual del hombre cuando estaba vivo.
Otros objetos ceremoniales, incluidos cinco colgantes de piedra en forma de media luna, también se encontraron al lado del esqueleto.
Se estima que estos dos individuos intrigantes tienen alrededor de 5,000 años de antigüedad y probablemente pertenecieron a la cultura Odinov, que prevaleció en la región. Si bien el verdadero propósito de los objetos encontrados en estas tumbas sigue siendo un misterio, al menos proporcionan algunas pistas fascinantes sobre las prácticas sociales y religiosas de este antiguo grupo de cazadores.