Uno de los descubrimientos que mayor revuelo ha causado en el mundo, tuvo lugar en Australia del sur en 1998. Se trata de una figura gigante que puede verse desde el espacio. Conocida como el Hombre de Marree, fue localizada en medio del desierto árido de Phoenix Springs, en la región occidental del municipio Marree (Australia).
Desde el momento de su hallazgo, las autoridades del país y diferentes medios locales, han intentado saber quién hizo el geoglifo más grande de la Tierra. Pero hasta ahora, después de todos estos años de investigación no hay nada concreto, solo algunas pistas poco confiables y un misterio en torno a la figura.
El hombre de Marree: figura gigante que se ve desde el espacio
El 12 de junio de 1998, el piloto Trevor Wright estaba volando sobre el territorio desértico del municipio Marree. Durante un instante que pudo fijar la mirada hacia el suelo, notó en la superficie algo muy extraño. Quedó impresionado ante lo que estaban viendo sus ojos.
Había un dibujo de una figura gigante, daba la impresión que era un hombre portando una lanza en posición de cacería. Así fue como Trevor encontró –sin saberlo- al Hombre de Marree, considerado hasta el día de hoy como el geoglifo de mayor tamaño en todo el mundo. Muy similar a las figuras de Nazca.
De inmediato se dio aviso a las autoridades, pero al llegar al lugar para comprobar lo que decía el piloto, no vieron absolutamente nada. Ante la insistencia de Trevor, subieron a un helicóptero para confirmar su información desde el aire. Todos se llevaron una gran sorpresa, la historia del piloto era cierta.
La figura gigante tiene unas medidas impresionantes, comenzando por el perímetro donde fue hecha, que va de 15 a 28 kilómetros. Además su tamaño completo medía 4,2 kilómetros, 35 metros de ancho y el contorno 30 centímetros de profundidad. Le dieron el nombre de «Hombre de Marree».
Da inicio una exhaustiva investigación
La noticia del hombre dibujado en el suelo árido del desierto, se esparció por toda la zona. Incluso llegó a estar en primera plana de muchos medios informativos, dando inicio a una exhaustiva investigación que involucró a la NASA, pues estos últimos aportaron una imagen satelital de la zona.
La imagen correspondía al 27 de mayo de 1998, apenas unos días antes de que se descubriera la figura gigante. Solo que en ella, no había ningún dibujo en el suelo, el sitio estaba sin nada. De manera que, el geoglifo fue hecho entre el 28 de mayo y el 12 de junio, pero es lo único concreto que ha arrojado la investigación.
También se indicó que curiosamente, el contorno del geoglifo coincidía, al revés, con el del bronce Artemision Zeus rescatado del fondo del mar Adriático en 1928. Se piensa que esta estatua fue construida en el año 460 a.C.
La autoría y los motivos de creación del Hombre de Marree, son desconocidos. Aunque topógrafos expertos, aseguran que se pudo haber utilizado una retroexcavadora para dibujar al hombre de Marree. Esta teoría tiene cierta lógica, solo que nadie en los alrededores escuchó el ruido de máquinas, no habían huellas de neumáticos de vehículos en la zona, ni tampoco se vieron movimientos extraños.
Surgen pistas que desconciertan a las autoridades
Pasado un poco de tiempo luego del descubrimiento, comenzó a circular en los diarios locales, una información de origen anónimo relacionada con el dibujo de la figura gigante. Según la escritura usada en los comunicados, el autor o autores, podían ser extranjeros.
La forma de expresar las medidas y algunas frases mencionadas en las notas, no se utilizan comúnmente en Australia. El desconcierto fue aún mucho mayor, cuando una persona que recorría la zona halló una botella con la bandera de los Estados Unidos grabada en su superficie.
Luego de unos meses, el misterio en torno a la figura gigante aumentaría, a causa de una placa enterrada que encontró la policía cerca de la nariz del hombre de Marree. El descubrimiento fue posible porque varios funcionarios australianos recibieron un fax, allí se les indicaba el lugar donde debían buscar.
La placa contenía una huella de los anillos olímpicos, así como una bandera norteamericana y una cita del libro The Red Center, que fue escrito en 1946 por el autor estadounidense Hedley H. Finlayson.
El texto en cuestión, se refiere a una tribu que se destaca por ser excelentes cazadores con lanzas. Todo parece señalar que existe una relación directa con la imagen de la figura gigante.
Solo quedan algunas teorías
Para tratar de explicar el origen del hombre de Marree, se han planteado varias teorías. Desde la autoría extraterrestre, pasando por una estrategia para llamar la atención de los turistas, hasta la reivindicación de los pueblos indígenas australianos.
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En 2016 el empresario australiano Dick Smith,, decidió abordar el misterio y durante dos años contrató sin éxito, un equipo para investigarlo. Posteriormente, en 2018 ofreció una recompensa de 5.000 dólares australianos (3.712 dólares estadounidenses) para cualquier persona con información sobre el origen de esta obra.
A pesar de tantos planteamientos, esfuerzos gubernamentales y una recompensa para descubrir quién o quiénes elaboraron el geoglifo, no hubo resultado alguno.
Aunque fue tallado en el paisaje hace solo un poco más de dos décadas, su existencia nos recuerda un poco a las enigmáticas líneas de Nazca o a los famosos «crop circles» o círculos en los cultivos de Inglaterra y Estados Unidos. La figura presenta uno de los mayores misterios que Australia haya visto jamás; el geoglifo es tan grande que se puede ver desde el espacio, sin embargo, hasta ahora ni un solo testigo puede dar fe de su creación.
Referencias: BBC / Muy interesante / El Confidencial.
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