Un hombre que había estado usando un meteorito como tope de una puerta está listo para una ganancia financiera inesperada, después de descubrir que puede valer 100,000 dólares.
El hombre, obtuvo el meteorito en 1988 cuando compró una granja en Edmore, Michigan. El propietario anterior había estado utilizando el meteorito para mantener abierta una puerta en un cobertizo, después de verlo caer a través del cielo con su padre.
El nuevo propietario mantuvo el meteorito, y también lo usó como un tope de puerta. Pero cuando se enteró de que se vendieron otros meteoritos en enero de este año, comenzó a estudiar su venta.
Llevó el meteorito a la Central Michigan University (CMU), donde la doctora Mona Sirbescu, miembro de la facultad de geología, observó el espécimen. Y ella pudo darse cuenta de que la roca tenía mucho más valor del esperado.
Con un peso de 10 kilogramos, lo convierte en el sexto meteorito más grande jamás encontrado en Michigan.
La Dra. Sirbescu lo estudió con un instrumento de fluorescencia de rayos X para descubrir que se trataba de un raro meteorito compuesto por aproximadamente 88 por ciento de hierro y 12 por ciento de níquel.
Posteriormente, envió una porción del meteorito a la Institución Smithsonian en Washington, DC para verificar sus hallazgos. Si se confirma, el meteorito podría venderse a un museo o coleccionista, incluso el propio Smithsonian está considerando comprar la roca completa.
El meteorito también puede contener otros elementos raros que podrían aumentar su valor.
Millones de meteoros entran en la atmósfera terrestre cada año. En julio de este año, un meteorito impactó en la Tierra, explotando con 2,1 kilotones de fuerza sin que ninguna entidad aeroespacial diera información oficial al respecto.
En su mayoría los meteoros que entran a la atmósfera se queman y evaporan antes de tocar tierra, por lo que los ejemplares íntegros tienen mucho valor.
Los meteoritos pueden variar enormemente en precio dependiendo de los elementos que contienen. Los meteoritos pedregosos comunes, conocidos como condritas, pueden venderse por menos de $ 25 dólares. Pero los meteoritos de hierro y níquel, siendo mucho más raros, pueden valer mil veces más, dependiendo de su composición.
El propietario ha dicho que otorgará el 10 por ciento de cualquier venta a la CMU para financiar la ciencia terrestre y atmosférica.