El mundo, un lugar de incontables misterios sin resolver todavía alberga muchas ruinas antiguas que se conservan en perfecto estado. Lo cierto es que, al contemplar algunas edificaciones construidas en la antigüedad quedamos perplejos por la majestuosidad que emite a cualquier observador. Uno de ellos, es el observatorio solar de Chankillo, el más antiguo de América.
Aunque muchas personas en la actualidad creen que nuestros antepasados eran individuos incultos que carecían de muchas habilidades, los incontables hallazgos arqueológicos indican todo lo contrario.
Una prueba extraordinaria el gran avance de la humanidad en la antigüedad, es el observatorio astronómico más antiguo de América que se encuentra en Perú.
Mucho tiempo antes de que existieran los incas y se empezara a adorar al dios sol, ya este lugar existía. Pero, ¿con qué objetivo fue construido? ¿Cómo pudieron elaborar una construcción de tal magnitud?
Impresionantes características jamás vistas
Es cierto que en otras partes del mundo han existido lugares fabricados para hacer observaciones de la luna, el sol, las estrellas. Pero estas ruinas, mejor conocidas como «Chankillo» son una obra perfecta.
Lo más asombroso de Chankillo, es que, es un observatorio con características muy particulares que no se han repetido en ninguna parte del mundo. Una civilización completamente desconocida, construyó uno de los lugares más célebres de Perú.
La descripción detallada de un panorama maravilloso
El sitio se encuentra ubicado exactamente en el desierto de la costa peruana, a unos 365 kilómetros al norte de Lima. Actualmente, puede ser visitado por los turistas.
Una de las partes más asombrosas de este tesoro arqueológico es que cuenta con una extensa hilera de piedras. Al mirarlas desde cierto punto se ve claramente una fila de 13 pequeñas torres compuestas por pedruscos. Estas rodean parte de la colina y trazan su horizonte desde el norte hasta el sur.
Por otro lado, estas ruinas también incluyen una antigua edificación de tres paredes en la cúspide de la montaña, y se le llama, «el templo fortificado». Además, también se encuentran dos construcciones conocidas como «el observatorio principal» y «el centro administrativo».
Una historia desconocida de un lugar célebre
El sitio data de hace al menos 2.300 años de antigüedad, y aunque las edificaciones son realmente famosas, nadie conoce la historia. Al igual que muchos otros lugares en el mundo, su origen y que civilización lo construyó continúa siendo un completo misterio en la actualidad.
Se llegó a la conclusión de que fue abandonado durante el primer siglo de la época cristiana. Pero también se desconocen los motivos que llevaron a los habitantes a olvidar por completo este lugar.
El complejo se extiende por unas 5.000 hectáreas, pero hasta el momento, solo se ha estudiado un 1% aproximadamente. Durante muchos años, esta construcción ha desconcertado a los científicos.
El misterio prevalece luego de las investigaciones
El lugar parecía ser importante pero envuelto por el enigma. Sin embargo, no fue hasta el siglo XXI, que algunos investigadores se interesaron y empezaron las excavaciones en el lugar conocido como «las trece torres».
A simple vista durante el día parecía ser una simple acumulación de piedras que bordeaba una colina. Pero, los arqueólogos pudieron comprobar que se trataba de algo mucho más importante que unas rocas desordenadas cuando empezaron a investigar. Quedaron impresionados cuando vieron la magnitud de lo que estaban mirando.
¿Con qué objetivo fueron construidas las torres de Chankillo?
Un estudio publicado en la revista Science en 2007, propuso que la secuencia de torres erigidas entre el 200 y el 300 a.C. «marcaba los solsticios de verano e invierno» y que Chankillo «era en parte un observatorio solar».
El arqueólogo peruano Iván Ghezzi, coautor de ese estudio junto con su colega británico Clive Ruggles, explicó que las torres fueron erigidas con gran precisión y colocadas para marcar diferentes posiciones del Sol, «permitiendo marcar fechas exactas».
Su propósito era cronometrar con asombrosa exactitud los meses, solsticios y equinoccios, las estaciones de siembra y cosecha y las fiestas religiosas.
Por lo tanto, estas pequeñas edificaciones fueron situadas en un lugar realmente estratégico con la finalidad de predecir la época del año. Es posible hacerlo al observar minuciosamente el nacimiento del sol, en la mañana o durante el atardecer, utilizando correctamente el punto de observación.
¿Quiénes edificaron la majestuosa obra?
Realmente no se sabe específicamente quienes fueron los que construyeron este impresionante observatorio. Pero existen algunas pistas que apuntan a que fue una civilización que existió mucho tiempo antes de los incas. Quienes durante años han sido catalogados como los mejores astrónomos del mundo antiguo.
Posiblemente esta antigua cultura también consideraba al Sol como una deidad. Una posible prueba de esto es que hay unas misteriosas escaleras que conducen a cada una de las torres. Por tal motivo se ha llegado a la conclusión de que en algún momento de la historia el lugar se utilizó como un centro de rituales.
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Recientemente, en el año 2021 Chankillo fue incluido en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO. Aunque se desconoce gran parte de la historia, este sitio es prueba del gran avance astronómico de las sociedades antiguas.
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