Si bien la existencia de los OVNIS no es un tema convencional de investigación científica, no faltan científicos que buscan vida extraterrestre.
En los últimos meses, han surgido emocionantes anuncios de las agencias espaciales más grandes del mundo que han proporcionado algunos de los indicios más tentadores hasta ahora de que la vida extraterrestre puede estar al acecho en nuestro propio sistema solar.
En primer lugar, los datos recopilados por el rover Curiosity de la NASA permitieron a los científicos identificar evidencia de materia orgánica antigua en la superficie de Marte. Estos «ingredientes para la vida» sugieren que el planeta rojo puede no haber sido tan carente de vida como lo es hoy en día.
Mientras tanto, las lunas de Encélado y Europa han sido señaladas como objetivos potenciales en la búsqueda de vida extraterrestre debido a los océanos profundos que cubren su superficie.
Sumado a esto, los científicos anunciaron recientemente que fueron «sorprendidos» por el descubrimiento de grandes moléculas orgánicas en Encélado, que orbita el gigante de gas Saturno.
El descubrimiento sugiere que, esta luna distante es el único cuerpo además de la Tierra que «satisface simultáneamente todos los requisitos básicos de la vida tal como la conocemos».
Sin embargo, la vida que se discute está muy lejos de construir y operar su propia nave espacial.
Los extraterrestres en el cine y la literatura a menudo se presentan como grandes, malévolos y mucho más avanzados tecnológicamente que la humanidad.
Stephen Hawking era conocido por hacer pronunciamientos sobre este tipo de extraterrestres, advirtiendo en varias ocasiones sobre los peligros de encontrarse con tales viajeros cósmicos.
Incluso comparó la reunión entre humanos y extraterrestres con la reunión de nativos americanos y Cristóbal Colón, que según sus palabras «no resultó tan bien».
Un equipo de la Universidad de Oxford aplicó la teoría de la evolución para «hacer predicciones que son independientes de los detalles de la Tierra», y concluyó que, en realidad, es probable que los alienígenas se parezcan a nosotros.
En la práctica, sin embargo, los expertos creen que las formas de vida extraterrestre más probables que encontraremos serán algún tipo de microbio alienígena.
Durante los primeros 2.9 billones de los 3.5 billones de años que la vida ha existido en la Tierra, consistió en pequeñas criaturas unicelulares. Los humanos modernos solo han existido por alrededor de 300,000 años.
Esto significa que la probabilidad de encontrar un planeta que no solo sea compatible con la vida sino que también albergue una vida compleja como la nuestra es increíblemente delgada.
La Astrobiología es el nombre dado a la rama de la ciencia que se ocupa de los orígenes hipotéticos y la evolución de la vida más allá del planeta Tierra. Muchos de sus defensores tienden a centrarse en las bacterias que habitan en los entornos más extremos del planeta, razonando que las regiones más frías, calientes o más ácidas de la Tierra son representaciones razonables para las condiciones que se encuentran en planetas y lunas distantes.
Ahora que las señales prometedoras se han descubierto relativamente cerca de la Tierra, los científicos están utilizando su conocimiento de la vida en la Tierra para guiar su búsqueda de alienígenas.
Misiones como el próximo lanzamiento de ExoMars y la posible exploración futura de Encélado podrían basarse en los hallazgos de los últimos meses, y tal vez incluso en la primera evidencia concreta de vida extraterrestre.
