Los ángeles son una de las figuras más importantes del cristianismo. Sin embargo, su concepto no nace de él; las culturas antiguas ya mencionaban a hombres alados con características similares y con una labor fundamental.
En el antiguo Egipto, la mitología sumeria, incluso en la celta podemos encontrar seres celestiales y alados en sus panteones.
Las características de estos entes son muy similares; hombres con alas que vuelan por los cielos y que de una u otra forma son los protectores de la humanidad. A continuación, veremos como las diferentes culturas de la antigüedad y actuales representaron a los hombres alados.
Cristianismo, judaísmo e islam
En las religiones más populares del mundo, tienen un concepto bastante similar de los ángeles. Una de sus misiones más importantes es adorar al Dios que los creó.
El Islam, por ejemplo, asegura que todos los ángeles son fieles a Dios, pero en el cristianismo menciona que un grupo se reveló a éste, siendo desterrados del cielo y convirtiéndose en demonios.
La mayor información sobre los ángeles en el judaísmo la podemos encontrar en la cábala medieval. En el cristianismo, el concepto es relativamente el mismo y de hecho, su fuente principal concuerda, aunque también aparecen mencionados en el Nuevo Testamento.
Las primeras religiones y los ángeles
La primera vez que se hace mención a seres alados, fue en la antigua religión monoteísta de zoroastrianismo.
Esta religión cree en un solo dios bondadoso y como es de esperar, cuentan con un gran número de servidores que cumplen con la misma misión de los ángeles.
Existen 7 seres buenos, que serían los ángeles de dios y 7 seres malos, que cumplen la función de los ángeles caídos.
También hacen referencia a 20 emanaciones del Espíritu que, en la literatura zoroástrica, se reflejan como los arcángeles.
Ahora, si nos referimos a la antigua sumeria, no existía un concepto textual sobre los ángeles, si creían que cada persona contaba con un espíritu protector.
Esta deidad era representada con aspecto humano, con la diferencia de que poseía grandes y poderosas alas. Muchos expertos han relacionado este concepto a los ángeles de la guarda.
De hecho, se cree que los ángeles en el judaísmo nacen a partir de este concepto.
Como la sumeria, la religión egipcia, tampoco contaba con una representación textual de los ángeles actuales. Pero existían las diosas aladas.
Se han encontrado diferentes tipos de artes donde aparecen Nut e Isis como seres alados. Según sus descripciones, Nut podría ser el ángel de la Muerte, ya que era ella a quien invocaban para que protegiera a los fallecidos. Isis, por el contrario, usó sus alas para revivir al dios Osiris.
Otras culturas y su representación de seres alados
Los griegos tienen una diosa principal alada; Niké. Y junto a ella, está su hijo Eros. Posteriormente éste se convierte en Cupido para los romanos.
Sería este ser alado quien serviría de inspiración visual, para la representación de los ángeles del cristianismo y otras ramas espirituales más actuales. Especialmente al ser la representación del ángel del amor.
En la religión budista podemos encontrar a los «bodhisattvas», o seres iluminados. Estos entes proponen su entrada al Nirvana, para poder ayudar al resto de las personas a alcanzar la iluminación. Se cree que un bodhisattva puede aparecer como guía durante la meditación.
La representación artística de estos seres es casi idéntica a los ángeles; hombres brillantes con grandes alas.
El hinduismo, siendo una de las religiones más antigua del planeta, su panteón tiene a los gandharvas y a los devas. Seres sumamente parecidos a los ángeles.
La representación artística de los gandharvas es de seres musicales con grandes alas, muy parecidos a los ángeles de los coros celestiales.
Los devas, por otro lado, son seres brillantes que tienen como misión ayudar a los humanos a encontrar su camino espiritual.
Volviendo a Europa, debemos hablar de los celtas. Esta religión nació previo a la llegada de los romanos. Es por eso que los ángeles celtas, o anamchara, eran parte de la vida diaria de dicha cultura.
Tenían como objetivo ayudar a las personas a crecer espiritualmente, además eran sus guardianes. Muy similar al Ángel de la Guarda.
Los ángeles celtas tenían diferentes rangos; los de mayor jerarquía estaban en comunión con la Divinidad. Les siguen los ángeles que están ascendiendo a la Divinidad y, por último, están los ángeles que están en el mundo físico junto a los humanos, en bosques, ríos o cuevas. Muy similar a las hadas.
Religiones contemporáneas
Existen varias religiones que han nacido en los últimos siglos, como el de los mormones o la Nueva Era. Estas religiones también cuentan con ángeles, que juegan un papel importante en cada una de ellas.
Obviamente, su principal referente son los ángeles cristianos o una combinación histórica de seres alados. La Nueva Era, por ejemplo, intenta integrar a todos los seres mencionados anteriormente.
Si contamos como creencia a la ufología, podemos encontrar conceptos bastantes interesantes sobre los ángeles.
Basándose en ciertos aspectos poco claros de la Biblia y de textos apócrifos como el Libro de Enoc, nace la teoría de que los ángeles son en realidad seres extraterrestres que llegaron en la antigüedad.
Su misión no es muy clara; algunos aseguran que era hacernos evolucionar como especie para esclavizarnos, pero otros creen que su misión era ayudarnos como civilización.
Es común que las religiones más modernas se hayan basado de otras más antiguas. Y esto lo podemos ver en la representación de los ángeles. Seres alados con el objetivo de ayudar a la humanidad que aparecen desde los inicios de la mitología.
Referencias: La historia de los ángeles – aboutespanol.com
MÁS EN MYSTERY SCIENCE:
- Relatos de textos sumerios narrados miles de años antes que aparezcan en la Biblia.
- Enoc, el profeta excluido de la Biblia por su contacto con seres de otros mundos.
- Enoquiano: el misterio del lenguaje perdido de los ángeles.
Una publicación de Mystery Science. Todos los derechos reservados. – Está expresamente prohibida la redistribución y redifusión de este contenido sin previo consentimiento.
